Jugando en la selva
Habrá quien se emocione viendo Sonrisas y Lágrimas, La lista de Schindler o tal vez Apocalypsie Now. Yo me he emocionado hoy viendo la película/documental Eyengui.

No me emocionó la historia, ideada en un café gris en España, ni la banda sonora, compuesta en un sintetizador y grabada a varias pistas en un estudio de primera calidad. No fue tampoco el perfecto encuadre de las imágenes ni la documentación, que no criticaré, ya que no soy antropólogo.

Fueron sin duda días de fiesta para mis hermanitos de la selva, fueron días divertidos que aún hoy se cuentan de noche reunidos junto al fuego, con música y risas.
Demasiado acostumbrados los españoles a ver a los indíginas en un estado indolente y sufriendo calamidades en tantos fríos reportajes, aquí tal vez les sorprenda convertidos en ardientes actores y en excelentes (y pacientes) anfitriones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario